lunes, 29 de septiembre de 2014

Sombras en el Océano - Parte 1

Bajó de la litera con la misma energía con que lo hacía cada mañana. Tenía una larga barba y su pelo enmarañado daba la impresión de que nunca hubiera sido domado. Parecía un hombre joven, al menos a primera vista eso relataban sus facciones, pero sus ojos dejaban entrever una expresión distinta. Eran cristales de un verde parduzco, ávidos e incisivos, pero a la vez cansados. Tenía aquella extraña mirada de anciano que desentonaba por completo con su aspecto jovial. Un joven viejo impertinente que nunca paraba de moverse, aleteando las manos de un lado a otro, sin poder cerrar la boca un solo segundo.